Jesús Zamora
EditorAunque los fanáticos consideramos como canon profundo en Dragon Ball únicamente lo que hizo Akira Toriyama dentro de su manga, que abarca desde la primera aparición de Goku hasta la huida de este junto a Uub en medio del Torneo de las Artes Marciales, lo cierto es que el mangaka integró a su obra lore que no era suyo, sino de Toei Animation. Tal vez tú no lo conocías, pero este fue un capítulo de relleno de DB que enamoró tanto a Toriyama que lo convirtió en parte del manga.
El capítulo del anime de Dragon Ball favorito de Akira Toriyama
Akira Toriyama nunca fue un gran fanático del anime de Dragon Ball. No porque le desagradara, sino porque su atención estaba completamente volcada al manga, y su colaboración con Toei se limitaba a diseños ocasionales para películas y personajes secundarios. Sin embargo, hubo un especial para televisión que logró conmoverlo profundamente: el Episodio de Bardock, el padre de Goku, el cual narra la tragedia saiyajin de una manera trágica y magistral.
En una entrevista realizada el 21 de agosto de 2003, publicada en la guía de TV Dragon Ball Z Son Goku Densetsu, Toriyama confesó:
“Definitivamente, el episodio especial para TV de Bardock. Esa historia del pasado triste de él me emocionó mucho. Fue por eso que hice que Bardock apareciera un poquito en el manga también.”
Y dicho y hecho: el mangaka integró una escena de este especial de televisión en su obra mientras se desarrollaba la pelea de Freezer contra Goku.
Con el pasar de los años, la figura de Bardock se volvió esencial para Toriyama al punto de reescribir su historia dentro del canon años después con Dragon Ball Minus, algo que terminaríamos viendo adaptado en Dragon Ball Super: Broly.
De esta manera, el personaje, que nació fuera del manga, fue adoptado por su creador y resignificado como símbolo de legado y tragedia, y su evolución fue tal, que Bardock pasó de ser un producto animado más a convertirse en parte de la narrativa oficial de Goku, afectando directamente los orígenes del saiyajin y el tono de la saga entera.
El gesto de Toriyama es curioso y bastante poco común en su carrera, al menos hasta antes de la década de 2010: no solo reivindicó el valor de las historias ajenas que lograron tocar fibras más profundas en los fans, sino que también demostró cómo incluso los creadores pueden dejarse sorprender y emocionar por sus propias obras cuando son vistas desde otra perspectiva. En el caso de Bardock, un personaje nacido como relleno de Dragon Ball, sirvió para transformarlo en uno de los más humanos de toda la saga.
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