Jesús Zamora
EditorDespués de que se revelara la portada del volumen 40 del manga de Dragon Ball Super, Toyotaro y Shueisha brillaron por su ausencia en lo que respecta a ofrecer nuevo contenido de la obra que hizo grande Akira Toriyama. Para nuestra fortuna, un fan se citó con el mangaka, quien, muy amablemente, obsequió a este afortunado seguidor un increíble dibujo de Goku y Gohan en sus transformaciones más poderosas. El resultado es una ilustración que, sin duda, alivia la desesperación que ha causado el prolongado hiatus del manga.
Un nuevo dibujo de Toyotaro para sobrevivir al hiatus de Dragon Ball
Tal parece que el plateado es el nuevo color favorito de los saiyajin, o por lo menos así lo ha dejado claro el propio Toyotaro, quien ha convertido al Ultra Instinto y a la Bestia de Gohan en las formas definitivas de sus respectivos personajes. Desde su debut, estas transformaciones no solo marcaron un antes y un después en la franquicia, sino que se han convertido en verdaderos íconos de esta nueva era post-Akira Toriyama. La última vez que vimos las transformaciones de Goku y Gohan en acción fue en el capítulo 103 del manga, hace más de un año, cuando padre e hijo midieron fuerzas en un glorioso y descarado combate hecho para el puro deleite de los fans.
Casi un año después de ese épico enfrentamiento, y varias semanas tras la revelación de la ya legendaria portada del volumen 40 del manga de Dragon Ball Super, Toyotaro rompe el silencio y nos vuelve a sorprender con una ilustración que recupera la esencia más vibrante de Dragon Ball Super. El contexto fue especial: un fan japonés asistió a una firma donde el propio Toyotaro le regaló, con toda la humildad del mundo, este dibujo cargado de energía y nostalgia protagonizado por Goku y su hijo. Un gesto que, más allá del papel, tiene la fuerza de encender nuevamente el hype.
La imagen es puro espectáculo visual. Goku y Gohan, espalda con espalda, lucen sus fases Ultra Instinto y Bestia, en una composición que grita poder y actitud. Toyotaro juega con los contrastes y las miradas desafiantes, dejando claro que aunque el manga esté en pausa, estos dos guerreros siguen siendo el alma de la franquicia. Y sí, aunque sea un simple boceto en blanco y negro, el peso simbólico de esta ilustración es brutal.
Más allá de una postal bonita, este dibujo nos recuerda lo mucho que extrañamos ver avanzar la historia de Dragon Ball Super en el papel. El hiatus no solo dejó un vacío argumental, también nos hizo valorar el nivel artístico y narrativo que Toyotaro alcanzó en sus últimos capítulos, haciéndonos extrañarlo ahora más que nunca. Las expectativas están por las nubes, pero mientras el manga sigue en pausa, gestos como este mantienen viva la llama de los fans.
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